Guatemala, 24 de Noviembre del 2011

Ya firmamos. Ahora, a ver por qué

E

n días anteriores, concretamente el 17 de Noviembre, el FNL firmó con el Gobierno electo de la República un pacto relativo a la salud. No fue fácil llegar a la firma, pero finalmente se llegó. Es un pacto en el que se reflejan los temas propios de cuatro largos años de luchas, que llegaron a ser tales por el desinterés del Gobierno saliente para resolver los temas propios de la salud.

Pero todo indica que el tema está por dejar de ser prohibido. Salud deja las filas de las palabras muertas y pasa a insertarse en el temario nacional. Al parecer, la actitud del nuevo Gobierno es más amplia y comprensiva. Ahora, parecen estar dispuestos a entrar gobernando con mejores vientos, y así los nuevos Ministros, antes de asumir sus cargos, han aprendido a negociar.

Es por vez primera que se firma un Pacto antes de que el Estado entre en funciones. Es decir, vamos, al comenzar, por buen camino. Lo que se ha firmado, obviamente, no abarca todo el panorama en cuanto a salud. Apenas es un pedacito. Pero, de todas maneras, es un buen inicio.

Ciertamente han sobrado voces que claman que, por esa firma, el FNL ya se vendió. Que no se necesitaba más que una firma para que sus dirigentes marcharan al ritmo que mandata el Gobierno, o, caso peor, el Partido Patriota. Que ahora, después de la dichosa firma, todo el FNL se ha vuelto de camisa naranja. En fin, no faltan voces que sostengan todo esto, pero, en realidad, no merecen ser escuchadas.

Creemos que pierde su tiempo quien les preste oídos. No deben ser escuchadas, porque son voces viejas y gastadas, que nada bueno le han dejado al país. Son voces muy bien dispuestas para el debate insulso. Bien preparadas para decir nada en serio. Siempre, históricamente, han discutido banalidades y majaderías. Mejor dejémoslas ahí, que es en donde mejor se están.

Nosotros, entre tanto, tenemos mucho que hacer.

La Lucha Sigue